La Cámara de Diputados aprueba reforma para prohibir vapeadores y cigarrillos electrónicos
Este martes, la Cámara de Diputados aprobó una reforma constitucional que prohíbe la producción, distribución y comercialización de vapeadores, cigarrillos electrónicos, precursores químicos y el uso ilícito de fentanilo, además de otras drogas sintéticas no autorizadas. La iniciativa fue respaldada con 410 votos a favor, 24 en contra y sin abstenciones.
La reforma modifica los artículos 4 y 5 de la Constitución, con el fin de garantizar el derecho a la protección de la salud pública. Según el dictamen, la medida busca mitigar los efectos negativos que estas sustancias tienen en la salud y fortalecer la lucha contra el tráfico de drogas sintéticas, especialmente el fentanilo.
El fentanilo, un opioide sintético relacionado con una creciente crisis de salud pública a nivel mundial, ha sido identificado como una de las mayores amenazas en el ámbito de las drogas ilícitas. La reforma también prohíbe los precursores químicos usados en su producción, con el objetivo de frenar tanto su fabricación como su distribución.
El uso de los cigarrillos electrónicos y los vapeadores ha generado preocupación, particularmente entre los jóvenes, debido a los riesgos asociados con su consumo. Los expertos advierten que estos dispositivos, aunque populares, pueden inducir enfermedades respiratorias y adicción. Por ello, la reforma también responde al creciente uso de estos productos y busca prevenir problemas de salud relacionados con ellos.
Los vapeadores, dispositivos similares a los cigarrillos electrónicos, contienen líquidos que pueden incluir nicotina, al igual que los cigarrillos tradicionales. Estos líquidos son calentados por el dispositivo, creando un aerosol que los usuarios inhalan, lo que genera una sensación de "vapor". Sin embargo, según la Sociedad Americana del Cáncer, este "vapor" no es agua, sino un aerosol cargado con sustancias tóxicas que representan riesgos para la salud.
Con esta reforma, México refuerza su compromiso en la lucha contra las drogas sintéticas y el control de productos que ponen en riesgo la salud de la población. Ahora, la iniciativa pasará al Senado para su discusión y posible aprobación.
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